Como su propio nombre indica, se trata de un tipo de invernadero con una estructura similar a la de un túnel convencional. Así que, los invernaderos de tipo túnel no tienen paredes rectas. Esa es la principal característica de los invernaderos de tipo túnel. Y, así es como tienen su característica forma: su estructura es totalmente curva, desde el punto de fijación del suelo. Además, podemos encontrar invernaderos túnel con diferentes tipos de curvatura.
Por ello, también podemos conocer, al invernadero túnel, como invernadero de arcos al suelo o de laterales curvos.
En este tipo de invernadero, los arcos se fijan, directamente, al suelo. Se trata de arcos curvos, generalmente de acero galvanizado. Y, sobre ellos, se montan las láminas correspondientes (normalmente, suelen ser de polietileno).
A la versión más grande, de invernaderos túnel, se le conoce como invernadero macrotúnel. En este tipo de modelos, se deben utilizar postes, en forma de “y” para montar los arcos.
Estos postes hacen posible la colocación de túneles, unidos entre sí. Estos, repetidos sucesivamente, dan lugar a un macrotúnel. Es muy común ver este tipo de invernadero túnel en el cultivo de fresas, arándanos, sandías, melones, y otros cultivos de bajo porte.


Ventajas:
- Instalación Rápida: Fácil de montar y desmontar.
- Económico: Requiere menos materiales y es más asequible que otros tipos.
- Ideal para Cultivos Pequeños: Perfecto para hortalizas y flores en áreas reducidas.
Desventajas:
- Menor Aislamiento: Puede no ser tan eficiente en climas fríos sin calefacción adicional.